miércoles, 27 de febrero de 2013

La capacitación del personal como práctica de RSE



Por Mauricio Muñoz (*)

La capacitación de los recursos humanos en las pequeñas y medianas empresas (pymes) es una opción que cada organización puede o no implementar de acuerdo a sus políticas internas.
Sin embargo, no se deben obviar los beneficios que otorga al empleado y a la empresa misma el darle un mayor conocimiento técnico profesional: para la organización, una mayor capacidad que le permita aumentar su competitividad, mientras que el empleado gana un aumento de su valor en producción y desarrollo personal.
Entonces, la Responsabilidad Social en las pymes también puede enfocarse en el aumento del valor de su capital social en recursos humanos a través de la capacitación.
En nuestro país, donde existen deficiencias de capacitación y educación técnica en mandos medios, no es extraño que la pequeña empresa considere suficiente la condición que un empleado cumpla mínimamente con la exigencia técnica dentro del proceso de producción para mantenerlo en su puesto.
Sin embargo, la capacitación constante de los recursos humanos de la empresa debe ser una opción en la búsqueda de una mayor eficiencia competitiva y al mismo tiempo una oportunidad de mejorar-el perfil laboral y el desarrollo personal del empleado, convirtiéndose la empresa en ese ámbito donde el empleado puede desarrollarse personalmente.
Una de las problemáticas con la oferta laboral es, justamente, la capacidad técnica insuficiente de los recursos humanos. Enfocándonos en la población de sectores más vulnerables se observa que el hecho de acceder a un estudio técnico específico ya es un objetivo difícil de cumplir debido a las restricciones de recursos económicos, distancia a los centros de capacitación, y preparación previa recibida en la escuela y el colegio.
A nivel país, mayormente en departamentos del interior, existen jóvenes que concluyen la secundaria en un colegio rural y cifran todas sus esperanzas de superación personal profesional en tomar un curso de operador de computadoras que les mejore el perfil técnico para acceder a algún puesto administrativo, y lo meritorio es que con esa oportunidad algunos llegan lejos.
Ante esta realidad, aun la pequeña y mediana empresa puede actuar de manera socialmente responsable con sus recursos humanos y otorgar las oportunidades de capacitación, incluso extendiendo esta iniciativa a familiares del entorno de la persona y trascender más allá de los límites de la empresa hacia la comunidad que le rodea.
Los beneficios que ambos (empresa y empleado) pueden obtener son innumerables, comenzando con la propia fidelización interna y el compromiso de los recursos humanos con la empresa, e institucionalmente obtener una percepción mejor de la función de la empresa dentro de la comunidad, más allá del lucro y la sostenibilidad comercial.

(*) Coordinador de Proyectos en la ONG Cetedi, organización que desarrolla numerosas iniciativas de RSE para diversas empresas, entre ellas la agrícola Agrofértil.

Artículo publicado en la revista Pymes del diario Última Hora - Página 14 - 25/02/2012